jueves, 3 de septiembre de 2009

A flor de piel


Algunas veces vivimos experiencias que nos hacen sentir diferentes en cuestión de segundos,son momentos que pasan por nuestra vida a veces buscados,otros son imprevisibles.
Hace unos días en una reunión,descubrí que sin pensarlo nos podemos transportar a algún lugar lejano de nuestro ser,desde nuestras entrañas nos salen esas sensaciones escondidas que creíamos que nadie podría descubrir, son historias de tan adentro que pueden hacer daño,pero en la mayoría de las ocasiones, nos ayudan a renacer, sentir que en alguien tenemos otro yo,un alma gemela que nos mueve por dentro y es capaz de entender con solo unas palabras ó un gesto,cuan grande son nuestros sentimientos, sin por ello sentir vergüenza ó miedo.
Escuchando a otros hablar de su vida,me sentí tan cercana como invadida por el deseo de explicar tantas cosas, que llevan esperando salir desde mi alma al exterior.
Es como cuando por fin, alguien te deja ser puro sentimiento y sabes que es el momento y el lugar de ser de nuevo tú y solo tú, sin artificios, sin más razón que dejar volar la necesidad de expresar cuanto habita en ti.
He llorado escuchando a otros,porque me vi reflejada en ese sentimiento de corazón, donde no importa que piensen el resto del mundo ,pues te ves tan fuerte y segur@ de lo que sientes y entre quienes te rodean,que el solo hecho de poder hablar te pone a flor de piel.Hay cosas que siempre tienen un por qué y hay personas que se cuelan en nuestras vidas para hacer de
nosotr@s unas personas más puras, son esas gentes que tienen tanta nobleza de corazón, que te invade la necesidad de creer en el ser humano una vez más.
Atte: Marisol.V.E.

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